La Cámara de Diputadas y Diputados aprobó en su primer trámite un proyecto para "ampliar hipótesis de expulsión como pena sustitutiva", lo que permite que los condenados extranjeros por cierto tipo de delitos vinculados a la Ley 20.000 (vinculada a tráfico de estupefacientes) y en ciertas condiciones puedan pedir la expulsión como pena sustitutiva en la figura de la denominada "pena mixta".
La iniciativa plantea que las personas, tras cumplir una parte de la condena en prisión en nuestro país, podrían acceder a la opción de ser expulsados de Chile, hecho que también ayudaría a bajar la presión y la población de los recintos penitenciarios.
El proyecto es impulsado por el gobierno del Presidente Gabriel Boric, tiene suma urgencia y recibió el apoyo de 82 votos a favor, 47 en contra y 5 abstenciones, siendo respaldada por parlamentarios de distinto sectores, a excepción de la UDI, PDG, Partido Republicano y Evópoli.
Una de las críticas de esta iniciativa fue la diputada Flor Weisse (UDI), que aseguró que la iniciativa era como un "beneficio" para quienes cometieran este tipo de delitos. "Este proyecto en su visión general yerra en la forma de hacer frente a un peligro mucho mayor, que es el hacinamiento carcelario. Si bien es una situación que hay que abordar, el narcotráfico y el crimen organizado son delitos muchos más graves, las penas deben ser efectivas. Ningún delincuente del narcotráfico debe estar fuera de la cárcel".
Sin embargo, el parlamentario Raúl Leiva (PS), presidente de la Comisión de Seguridad Ciudadana, señaló que con esto se busca “hacerse cargo de una realidad. Las cárceles del norte del país no mantienen detenidos o privados en libertad a aquellos grandes narcotraficantes, sino muchas veces a mujeres bolivianas que hacen de burreras para traer droga al país. Lo que pretende solucionar esta normativa es que aquellas personas que han cumplido 1/3 de su condena, han tenido buena conducta y han sido condenados por ciertos delitos del microtráfico, puedan acceder a ser expulsados”.
Comments