Johanna Hernández, quien lleva más de cuatro años presa en el Centro Penitenciario Femenino de Santiago (CPF), condenada por el parricidio de su ex esposo, el profesor Nibaldo Villegas, presentó una solicitud para ser trasladada al “módulo católico” en la ex cárcel de mujeres de Santiago, argumentando su deseo de participar en programas de reinserción social y de acceder a educación superior.
En audiencia de amparo, el magistrado no acogió la solicitud de la defensa de la sentenciada. En su resolución, el magistrado precisó que teniendo en consideración el informe de Gendarmería, es posible advertir que la ubicación actual de la sentenciada responde a criterios de seguridad, lo que se sustenta en que "efectivamente el módulo en que se encuentra hoy hay pocas internas, sólo 11".
Agregó que "el módulo al que se pretende el traslado, está al límite de su capacidad, con 57 internas de distinta calificación".
En su argumentación, el magistrado resolvió que "se puede establecer que los intereses de la condenada son cubiertos actualmente, pues tiene la posibilidad de participar en actividades religiosas. En el segundo aspecto, además, desde febrero 2021 asiste a un taller con remuneración, por lo que no se advierte necesidad de traslado".
Asimismo, el tribunal estableció que la actual ubicación de la condenada en el módulo de custodia directa del recinto, no le impide iniciar sus estudios preuniversitarios.
Sandra Zapata, alcaide del penal, aseguró que un proceso espiritual de reinserción social se puede hacer perfectamente en el módulo de “custodia directa”, detallando además que Hernández asiste regularmente a misa, mientras que el cambio de sección al que aspiraba no depende de una invitación que le haga una religiosa externa a Gendarmería.
Y entre los antecedentes de la nueva vida de Hernández que entregó Zapata, comentó que tiene un trabajo remunerado en el taller de tejido Amigorumie, que implica un pago de $460 mil desde febrero de 2021.
Incluso, detalló que está en lista de espera para sumarse a programas de intervención especializada.
En consecuencia, la mujer condenada a presidio perpetuo calificado en mayo del 2019, por el asesinato del profesor Nibaldo Villegas junto a su amante Francisco Silva en Villa Alemana, ahora tendrá que esperar la determinación que adopte el tribunal de garantía en una audiencia agendada para el 23 de octubre.
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