Investigadores de la Universidad de Texas en el Centro Médico Southwestern crearon una inyección que disminuiría a la mitad los efectos de la borrachera. Así es, los molestos síntomas de la embriaguez que sienten algunos, podrían ya no ser una molestia, o al menos no como antes.
El equipo descubrió que la hormona FGF21 puede proteger a los ratones de los efectos del etanol, como la pérdida del equilibrio y el reflejo de enderezamiento. Los autores del estudio también revelaron que el hígado no sólo se encarga de metabolizar el alcohol, sino que también emite señales hormonales al cerebro para protegerlo de los efectos perjudiciales de la intoxicación, como la pérdida de conciencia y la coordinación.
“Los seres humanos han buscado durante mucho tiempo agentes que pudieran revertir la embriaguez, y ahora hemos descubierto algo para lograr este efecto que ha estado en nuestros cuerpos todo el tiempo”, dijo David Mangelsdorf, profesor de farmacología y codirector del estudio.
Lo interesante de este estudio es que demostraron que inyectar una dosis alta en FGF21 acelera drásticamente la recuperación de los efectos provocados con un consumo excesivo de alcohol activado una parte específica del cerebro llamada las neuronas noradrenérgicas -ubicada en el cerúleo- que controla el estado de alerta y excitación.
“Nuestros estudios revelan que el cerebro es el mayor campo de acción de los efectos de FGF21. Ahora estamos explorando en mayor profundidad las sendas neurológicas por las que FGF21 ejerce su efecto de sobriedad”, detallan los autores.
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