La Corte de Apelaciones de Valdivia confirmó la condena de 12 años de cárcel contra una madre que intentó matar a su propia hija de 8 años en 2020, siendo sentenciada por parricidio frustrado.
"Con el propósito de atentar contra su vida y la de su hija, (la mujer) abrió cuatro llaves de paso de una cocina a gas existente al interior del hogar y prendió fuego, provocando una explosión (...) que causó daños en la estructura de la vivienda y en la víctima", señalaba la sentencia.
La niña quedó con el 21 por ciento del cuerpo quemado, concentrándose el daño en su frente y cuero cabelludo, abdomen y extremidades inferiores y superiores, según acreditó el Servicio Médico Legal.
La madre, en tanto, resultó con el 17 por ciento de su superficie corporal quemada: cara, tronco, antebrazo, brazo derecho y ambas piernas.
"La sentencia determina que la acusada, conociendo las relaciones que la ligan a la víctima (hija), con el ánimo de causar su muerte y la de su hija de 8 años de edad, estando con la niña al interior del departamento donde vivían, mediante una acción dolosa e intencional procedió con tal propósito a abrir las llaves de paso de una cocina a gas existente en el lugar, lo que provocó acumulación de gas licuado, para luego proceder a encender un elemento idóneo que provocó una explosión que causó daños en la vivienda y lesiones de gravedad en la niña y la acusada, no verificándose la muerte de ésta por causas independientes a su voluntad, parecer que es compartido por esta Corte y que permite desestimar el recurso, en este acápite", agrega el fallo.