Un joven de 36 años debió permanecer en coma inducido por una semana tras consumir 20 litros de agua en un día, lo que le provocó un edema cerebral e hiponatremia (un extremo bajo nivel de sodio).
Según explicó LUN, Francisco Lamatta, quien fue diagnosticado con Trastorno del Espectro Autista (TEA), llegó el 27 de enero a la Posta Central, y fue finalmente dado de alta este sábado.
El joven, de 36 años, tiene antecedentes de diabetes, por lo que los médicos, anteriormente habían mandado que “Panchito”, como le dice su familia, no consumiera más bebidas cola, ya que podría afectar su salud.
Ante esto, el hombre comenzó a beber agua con mayor frecuencia, por lo tanto, su familia cortó el suministro de la casa. Sin embargo, Francisco se las arregló para sacar agua de los bidones y botellas que encontró mientras buscaba en la noche cuando su familia dormía.
“Como a las 17:00 horas del viernes vomitó y empezó a botar agua por todos lados, por la nariz, por la boca, le dio diarrea y empezó a convulsionar. Inmediatamente, nos dirigimos a urgencias en la Posta Central".
"Cuando íbamos en el auto quedó inconsciente”, contó María José Lamatta, hermana de Francisco, a Las Últimas Noticias.
Francisco estuvo una semana en coma inducido y pudo ser dado de alta el pasado sábado 11 de febrero. “Ha sido un milagro. Le dieron el alta y nos vamos con hospitalización domiciliaria proporcionada por la Posta. Estoy tremendamente agradecida con el equipo completo de la UCI de la Posta Central”, concluyó su hermana.
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