Japón pagará una millonaria cifra por niño, a las familias que esté dispuestas a abandonar Tokio para vivir en otra ciudad del país. Esta medida busca aumentar la tasa de natalidad y descongestionar la ciudad.
El Gobierno intentará animar a las familias para que se muden con un generoso pago de hasta 1 millón de yenes (7.600 dólares o 7.220 euros) por hijo si cambian la superpoblada Tokio por municipios fuera de la ciudad y regiones circundantes. La cifra es más del triple de los 300.000 yenes (2.173 euros) que ofrece el plan vigente desde 2019.
Los que acepten el dinero deberán vivir en la provincia durante un mínimo de cinco años y tendrán que devolver el dinero si abandonan el lugar antes del plazo acordado. En el caso de que un hijo ya tenga 18 años, podrá seguir recibiendo el pago gubernamental siempre y cuando esté cursando el último año escolar.
La disminución y el envejecimiento de la población japonesa y la emigración de los jóvenes a la capital han afectado desproporcionadamente a las regiones situadas más allá de Tokio, Osaka y otras grandes ciudades del país.
Alrededor de 1.300 municipios japoneses ya se han inscrito para acoger a los tokiota emigrantes. Según fuentes gubernamentales, algo menos de 2.400 personas se beneficiaron del pago de reubicación en el año fiscal 2021, una cifra que equivale aproximadamente al 0,006% de los 38 millones de habitantes del área metropolitana de Tokio.