Esta semana, investigadores confirmaron la existencia de un exoplaneta usando por primera vez el telescopio James Webb de la NASA, que hasta el momento era desconocido.
El LHS 475 b, tal como lo denominaron científicamente, posee un diámetro casi idéntico al de la Tierra, de acuerdo a lo que informaron los expertos de la NASA, de la Agencia Espacial Europea y de la Agencia Espacial Canadiense. Dos de las características principales es que orbita alrededor de una estrella diferente al sol, en un proceso que dura dos días, y que tiene un clima cálido.
"No hay duda de que el planeta está ahí. Los datos prístinos de Webb lo validan", dijo Lustig-Yaeger, citado en comunicado de la Agencia Espacial Europea (ESA).
“Estos primeros resultados de la observación de un planeta rocoso del tamaño de la Tierra abren la puerta a muchas posibilidades futuras para estudiar la atmósfera de planetas rocosos con Webb”, coincidió Mark Clampin, director de la División de Astrofísica en la sede de la NASA en Washington. “Webb nos está acercando cada vez más a una nueva comprensión de los mundos similares a la Tierra fuera de nuestro sistema solar, y la misión apenas comienza”.
Recordemos que el James Webb ya había observado exoplanetas en ocasiones pasadas. De hecho, hace un tiempo reveló la atmósfera de uno de ellos. Pero esos ejemplos ya eran conocidos incluso desde antes del lanzamiento del telescopio espacial. Así, estamos frente a uno de los mayores logros conseguidos por el observatorio hasta la fecha.
Comments